jueves, 20 de enero de 2011

Cuando solía soñar...

Mis labios ya te esperaban...
cuando era niña yo soñaba con este lugar,
con este espacio donde no cabe ni sabe la soledad,
donde se disfruta el amanecer y tu tierno mirar,
sonrío cuando suelo pensar en tu cuerpo y el mio
junto al mar.

Nosotros callados...
todos hablando,
nada interesa,
porque el sólo pensar
me hace suspirar.

Dejemos que todo marche,
que todo tiemble,
que todo se mueva,
y que nada calle.

De niña yo solía soñar,
cuando mis pestañas caían,
un deseo solía soplar,
fruncía los ojos, y dejaba que mi corazón se agitara,
para emitir sonidos de fe que pudieran llegar hasta tu hogar.

Equidistantes y cuadrantes,
vacio y volumen,
caída y altura,
la fórmula perfecta que podemos conformar.

La soledad existe,
pero la suelo adorar,
como añoro tus besos,
tus abrazos cuando lejos sueles estar,
no hay más de que hablar.

No hace falta decir,
lo que aquí está,
lo que se puede tocar
sentir, olfatear y respirar.

1 comentario:

artdegordejuela dijo...

Está muy bien el texto.

Un saludo.